¿Estás hambrienta de gozo en tu vida?
¡Encuentra cómo esta epístola especial motiva a todos quienes la leen a conocer a Jesús y conocer el gozo!
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Esta guía de estudio consiste de 12 lecciones. Cada lección comienza al pedirle leer todo un pasaje de la Biblia para que pueda obtener la idea general. Si usted no puede hacer toda la lección en una semana, por favor lea el pasaje bíblico que se estudia.
Cada lección incluye preguntas centrales que cubren la narrativa del pasaje. Estas preguntas centrales, le llevará a través del proceso de estudio inductivo de la Biblia— observación, interpretación, aplicación. El proceso se entiende más fácilmente en el contexto de responder estas preguntas:
Las preguntas en Tu Viaje de Gozo son las preguntas de aplicación en este estudio. Éstas le guiarán a la introspección y aplicación de una verdad específica en su vida.
Descubrimientos más Profundos (opcional): Entre las secciones se encuentran preguntas opcionales para mayor investigación en temas que no tenemos tiempo de cubrir adecuadamente en las lecciones, que enriquecen el estudio básico. Si usted se reúne en un grupo pequeño, su líder puede darle la oportunidad de compartir sus “descubrimientos.”
Ayudas en el Estudio: Para ayudarle en una interpretación y aplicación adecuada del estudio, ayudas adicionales se encuentran ubicadas donde sean apropiadas en la lección:
El Nuevo Testamento abre con el nacimiento de Juan y Jesús. Cerca de 30 años después, Juan desafió a los judíos al arrepentimiento (dejar el pecado y volverse hacia Dios) al hacerlo por el bautismo de agua – una práctica familiar del Antiguo Testamento usada para el arrepentimiento, así como cuando un Gentil se convertía al judaísmo (el ser lavado de la idolatría).
Jesús, Hijo encarnado de Dios, mostró públicamente al mundo cómo es Dios y enseñó Su camino perfecto por 3 a 3 años y medio. Después de preparar a 12 discípulos para continuar la obra terrenal de Cristo, Él murió voluntariamente en una cruz por los pecados de la humanidad, se levantó de los muertos y regresó al cielo. El registro de Su vida terrenal se halla en los 4 libros conocidos como los Evangelios (los libros bíblicos de Mateo, Marcos, Lucas y Juan nombrados por el compilador de cada registro).
Después del regreso de Jesús a los cielos, los seguidores de Cristo fueron llenos de poder del Espíritu Santo y llevaron el mensaje de salvación del Evangelio entre los judíos, de los cuales un número de ellos creyó en Cristo. El apóstol Pablo y otros llevaron las buenas nuevas a los Gentiles durante 3 viajes misioneros (registrados en su mayoría en el libro de Hechos). Pablo escribió 13 epístolas del Nuevo Testamento a iglesias e individuos (Romanos hasta Filemón). La sección de nuestra Biblia de Hebreos a Judas contiene 8 cartas adicionales escritas por cinco hombres, incluyendo dos apóstoles (Pedro y Juan) y dos de los hermanos de Jesús (Santiago y Judas). El autor de Hebreo es desconocido. El apóstol Juan escribió también el Apocalipsis, el cual resume el programa final de Dios para el mundo. La Biblia termina como comenzó – con una creación nueva y sin pecado.
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Pablo se identifica a sí mismo como el autor de esta carta escrita a la iglesia en Filipo, una ciudad de Macedonia. Pablo, cuyo nombre hebreo era Saúl, nació en Tarso, una ciudad principal romana en la costa sureste de Asia Menor. Tarso era el centro de la industria de tiendas, lo que ha podido influir en Pablo el escoger ese oficio como su ocupación (su principal profesión de sustento). Su profesión religiosa era la de un judío Fariseo.
Pablo, de la tribu de Benjamín (Filipenses 3:5) y entrenado a los pies de Gamaliel (Hechos 22:3), un respetado rabí de sus días. Él había sido un ferviente perseguidor de la iglesia primitiva (Filipenses 3:6; Hechos 8:3, 22: 4-5, 26:9-11) hasta que su vida cambió por conversión al cristianismo (Hechos 9:1-31, Gálatas 1:11-24).
Después de creer en Jesús como su Salvador, Pablo fue llamado por Dios a llevar el evangelio a os Gentiles (Hechos 9:15). Esto es algo increíble para uno que había sido un Fariseo comprometido como Pablo, quien no hubiera hecho nada por los Gentiles (Hechos 10:28). Pablo escribió 13 epístolas del Nuevo Testamento. La tradición mantiene que Pablo fue decapitado poco tiempo después que escribió 2 Timoteo en el año 67 DC (Información adaptada de The Woman’s Study Bible (BIblia de Estudio para la Mujer), p. 1834)
Filipos era una ciudad al este de Macedonia, o parte del norte de la Grecia moderna, a 10 millas del Mar Ageo. La ciudad fue fundada en el 356 AC por el rey de Macedonia, Felipe, padre de Alejandro Magno. Filipos era una ciudad estratégica en el imperio griego que estaba rodeada por montañas y cerca del mar. Mucho del tráfico del Este hacia Roma pasaba por Filipos, la cual servía como una ciudad portal entre Grecia e Italia (una encrucijada principal en el Camino Egnacio- uno de las avenidas imperiales que enlazaban los Mares Ageo y Adriático). Filipos era una colonia romana transplantada. Los ciudadanos en la colonia tenían los mismos privilegios y derechos de aquellos que vivían en Italia. Ellos podían mantener sus propios senadores y magistrados y no estaban sujetos al gobierno regional. Más importante aún, esto los excluía de los impuestos. Lucas se refiere a Filipos como “la primera ciudad de la provincia de Macedonia, y una colonia” (Hechos 16:12). Filipos era también el hogar de Lucas.
La iglesia en Filipos fue fundada en alrededor del 51 DC durante el Segundo viaje misionero de Pablo (para la historia completa véase Hechos 16:9-40). Durante esta visita a Filipos, Pablo y Silas probablemente buscaron una sinagoga para compartir el evangelio con los judíos locales (como era su costumbre cuando entraban en una ciudad – Hechos 16:13). La falta de una sinagoga indicaba que había muy pocos judíos en Filipos (se necesitaba al menos 10 hombres judíos para comenzar una sinagoga). Pablo y Silas hallaron, en vez de una sinagoga, un grupo de mujeres en las afueras de los portones de la ciudad, a las orillas de un río, reunidas para orar. Una de las mujeres a las orillas del río era Lidia, una negociante prominente quien adoraba al Dios de Israel (ella probablemente no era judía de nacimiento). Cuando ella escuchó las buenas noticias de Cristo, inmediatamente recibió salvación y se convirtió al cristianismo. Las buenas nuevas de Cristo fueran también aceptadas en su casa, la cual incluía posiblemente sus siervos e hijos. Lidia fue la primera creyente en Filipos y era una hospitable anfitriona a a primera iglesia en Europa, la cual se reunía en su casa.
Luego, Pablo y sus acompañantes se encontraron a una niña esclava poseída por demonios (Hechos 16:16). Pablo comandó al espíritu salir de la niña y ella, también, fue convertida. Ya que sus habilidades para adivinar la fortuna habían sido usadas por sus dueños para obtener ganancias, ellos se enfurecieron con Pablo por destruir su fuente de ingresos. Hombres deshonestos golpearon brutalmente a Pablo y Silas y fueron arrojados a la cárcel local por “alborotar a la ciudad” (Hechos 16:20).
Mientras estaban en la cárcel, Pablo y Silas conocieron al carcelero de Filipios. Después que las cadenas de Pablo y Silas fueron quebrantadas milagrosamente durante un terremoto, el carcelero que los había guardado, se convirtió al cristianismo (Hechos 16:23-34) y su casa entera creyó en Dios y fueron bautizados. Cuando Pablo y Silas dejaron Filipos, Lucas permaneció para continuar el ministerio de la iglesia recién formada. Al final del tercer viaje misionero de Pablo, éste visitó Filipos nuevamente. Pablo tuvo una relación muy cercana con la iglesia de Filipos. Ellos fueron fuente de motivación para él y también proveyeron financieramente para su ministerio más de una vez (Filipenses 4:15 & 16, 2 Corintios 11:9). Pablo llama a esta iglesia su “gozo y su corona” (Filipenses 4:1).
La carta a Filipenses fue escrita por Pablo cerca del 61 o 62 DC durante el arresto domiciliario en Roma (para detalles de su arresto y encarcelamiento véase Hechos 21:27 hasta Hechos 28). Bajo el “arresto domiciliario” Pablo fue encadenado a un soldado romano las 24 horas del día, pero estaba libre para recibir visitas y escribir (Hechos 28:17-31). El guarda se cambiaba cada 6 horas, lo que daba a Pablo una excelente oportunidad para compartir su fe con muchos guardas. Durante este período de tiempo, Pablo escribió las epístolas de la prisión: Efesios, Filipenses, Colosenses y Filemón. Filipenses fue la última de las cartas que Pablo escribió en prisión, tal como parece indicar Filipenses 1:21-28 sobre una decisión sobre su destino se tomaría prontamente.
La carta de Pablo a los filipenses es una expresión bien articulada de gratitud y gozo. ¿Qué es exactamente el gozo? ¿Cómo se diferencia de la felicidad? La felicidad es una emoción pasajera basada en circunstancias externas. Pero el verdadero gozo es diferente – es algo que viene del interior – es una paz abundante y un sentido de contentamiento y fortaleza que se debe a algo interno.
El verdadero gozo está basado en una relación salvívica con Dios y en mantener comunión con Él. El gozo del creyente se halla en la obra interna del Espíritu. Aún los no creyentes en Jesús pueden conocer la felicidad en las cosas buenas que Dios ha dado a todos los seres humanos generosamente. El cristiano conoce el gozo que está enraizado en el lazo que existe entre el creyente y el Señor y el lazo que existe con otros creyentes a quienes ha llegado a amar (Filipenses 1:4, 25-26; 2:2, 29; 4:1). Mientras más profunda sea nuestra relación con Jesús y Su pueblo el gozo que nos espera será mayor y menos dependiente es ese gozo de circunstancias externas.
“En el Antiguo Testamente gozo se utiliza en términos de la respuesta de una comunidad que adora a Dios. Una relación con Dios fue la llave. En el Nuevo Testamento, el uso más común del gozo (griego — chairo) indica tanto un estado de gozo como aquello que nos da gozo. Nuestra relación con Jesús, particularmente morar en Él y serle obediente, es una fuente de gozo (Juan 15:10-11). El gozo se produce en nosotros por el Espíritu Santo y es un fruto de Su presencia (Gálatas 5:22; 1 Tesalonicenses 1:6). No está unido a posesiones materiales, sino que es una inundación de salvación (Hechos 8:8; 16:34). El gozo no es dependiente de circunstancias externas y se aplica al sufrimiento, así como a la salvación (Hechos 13:50-52; 2 Corintios 7:4; Santiago 1:2; 1 Pedro 1:6-7).” (Adaptado de The Teacher’s Commentary (El Comentario del Maestro), p. 934)
Pablo menciona 15 veces la palabra gozo en esta epístola, así que es un mini estudio excelente del gozo. Esto significa que, en promedio, la palabra gozo aparece cada 7 versículos. Esto es aún más significativo cuando usted observa que mientras Pablo escribe estas palabras de gozo, ¡él se encuentra en prisión en Roma y encadenado a un guardia romano! ¿Qué conoce Pablo sobre el gozo que trasciende sus circunstancias? ¿Está usted hambrienta por gozo en su vida? Esta carta especial motiva a todos quienes la leen a ¡conocer a Jesús y conocer gozo!
“Gozo no es la ausencia de problemas, pero la presencia de Cristo.” (William Vander Haven)
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Esta lección de descripción general incluirá más lectura y tiempo que las otras lecciones del estudio. Pero, al leer la carta de Filipenses (4 capítulos en la Biblia) es la mejor forma de ver el mensaje en su total y así obtener “el cuadro” antes de dividirlo en secciones pequeñas para disfrutarlo más lentamente. Para su conveniencia, la carta a los Filipenses se le ha provisto en las páginas anteriores.
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Piénselo: “No le parece interesante que un gran líder como Pablo y su mano derecha, Timoteo, escojan el evaluarse y describirse a sí mismos como “siervos” de Jesucristo? La palabra griega que Pablo usa para “siervo” era doulos, la cual se refiere a un esclavo que no tiene voluntad, ni derechos o posesiones propias. En cambio, él era la posesión de otro…para siempre. El rol de un esclavo en la vida era singular: obedecer la voluntad de su Maestro rápidamente, calladamente y sin cuestionarlo.” (Elizabeth George, Experimentando la Paz de Dios, p.20)
Del Griego: La palabra “santo” aquí significa literalmente “santos”, o “separados,” y se refiere cualquier creyente en Jesucristo. (Hechos 9:13,32; 1 Corintios 1:2; Efesios 1:1)
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Referencia Histórica: ¿Cómo Pablo terminó encadenado en una prisión romana? Mientras estaba visitando Jerusalén, algunos judíos pidieron su arresto por predicar las Buenas Nuevas, pero él apeló a César para que escuchara su caso (Hechos 21:15-25:12). Él fue entonces escoltado por soldados a Roma, donde fue colocado en arresto domiciliario mientras que esperaba el juicio – no un juicio por quebrantar la ley civil, sino por proclamar las Buenas Nuevas de Cristo. En eso tiempo, las autoridades romanas no consideraban esto un delito serio. Sin embargo, pocos años después, Roma tomaría una opinión distinta del cristianismo y haría cualquier esfuerzo por eliminar su existencia. (Life Application Bible Studies (Estudios Bíblicos de Aplicación a la Vida), Philippians and Colossians (Filipenses y Colosenses, p. 5)
Referencia Bíblica: En comparación con la situación en Filipenses 1:15-17, Pablo describe a predicadores en Gálatas 1:6-9 quienes están predicando un evangelio distinto al verdadero evangelio de Jesucristo. La respuesta de Pablo a esta situacion es que el anhela que el predicador que distorsiona la verdad de Dios, aquel que es “anatema” o su mensaje sea destruido. Véase también 1 Corintios 15:3,4 y 1 Juan 5:10-12 para ver los elementos esenciales del verdadero evangelio.
Piénselo: Pablo disfrutó un evangelismo personal a la élite de la guardia romana (versículo 13) siempre estaba encadenado a un miembro de la guardia pretoria, la Guardia Imperial Romana. Cada seis (o probablemente cada cuatro) horas su guardia era cambiado. En 365 días al año, por dos años. Al menos cuatro guardias por día. ¡Pablo tuvo 2920 oportunidades de compartir personalmente sobre Jesús! Quizás algunos de estos soldados que fueron enviados a través del Imperio Romano compartieron el mensaje de Jesucristo cuando lo escucharon de los labios de Pablo el prisionero. ¡Qué ministerio! Uno que Pablo no hubiese tenido sino estuviese bajo guardia. (Elizabeth George, Experiencing God’s Peace (Experimentando la Paz de Dios), p. 36)
Piénselo: ¿Has considerado cuan pocas circunstancias de la vida están realmente bajo nuestro control? No tenemos control sobre el clima o sobre el tráfico en la vía expera o sobre las cosas que las personas dicen o hacen. La persona cuya felicidad depende de circunstancias ideales va a estar amargado la mayoría del tiempo. Y, sin embargo, el apóstol Pablo se encuentra aquí, en las peores circunstancias, ¡escribiendo una carta saturada de gozo! Sus circunstancias no pueden robarle su gozo, porque él no está viviendo para disfrutar circunstancias, él está viviendo para servir a Jesús. (Warren Wiersbe, Be Joyful (Sé Gozoso), p. 15,16, y 18)
a. A cada persona que está viva y respirando
b. Cada persona cuyas vidas son exitosas y llenas de cosas buenas
c. Personas que aman a Dios y son llamadas de acuerdo con Su propósito
d. Sólo a las personas a quienes esta carta de Romanos fue escrita originalmente
a. Sí
b. No
c. No estoy segura
a. Dios me deja sola y no sabe lo que está ocurriendo en mi vida
b. Dios sabe lo que está ocurriendo en mi vida pero a Él no le importa
c. Dios sabe pero no es lo suficientemente poderoso para hacer algo
d. A Dios le importa, Dios sabe, Dios es poderoso y Dios está activamente involucrado en mi vida
a. Algunas cosas
b. Solamente las cosas buenas que son obvias
c. Todas las cosas
d. Ninguna
a. Obrando para bien
b. Siendo parte del “gran cuadro” de la totalidad de la vida que Dios me ha dado
c. Ayudándome a anticipar mejor mi future en el cielo
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Del Griego: La palabra griega traducida “liberación” fue usada en formas diferentes en el Nuevo Testamento. A enudo se refiere a liberación spiritual – salvación, el nacer de Nuevo. Aquí en el versiculo 19, Pablo usó la palabra para referirse a la etapa final de su salvación (cf. Romanos 5:9) o su futura vindicación en una corte romana. No parece ser lo más posible el que haya tenido en mente su liberación de la prisión ya que las próximas dos oraciones el escribió sobre la posibilidad de acercarse su muerte. (The Bible Knowledge Commentary NT (El Comentario de Conocimiento Bíblico del NT), p. 651)
Para vivir:
Para morir:
Piénselo: La muerte no aterrorizaba a Pablo. Esto simplemente significa “partir” (Véase Filipenses 1:23, 24). Los soldados usaban esta palabra; significaba “desarmar la tienda y seguir”. ¡Qué cuadro de la muerte cristiana! La “tienda” en la cual vivimos se desarma en la muerte y el espíritu va al descanso con Cristo en el cielo. (Lea 2 Corintios 5:1-8.) Los marineros también usaban esta palabra; significaba “desamarrar el barco y ponerlo a navegar.”…Pero la partida era también en términos políticos; describía la liberación de un prisionero. El pueblo de Dios está en esclavitud por las limitaciones del cuerpo y las tentaciones de la carne, pero la muerte los liberará. O, ellos serán liberados con el regreso de Cristo (Romanos 8:18-23) si ha de ocurrir éste primero. (Warren Wiersbe, Be Joyful (Sed Gozosos), p. 45-46)
Piénselo: Algunas veces, tenemos expectativas no realísticas de lo que la vida debiese ser (por ejemplo: le caeré bien a todo el mundo, la vida siempre será buena, puedo encontrar seguridad en este mundo, etc.). El resultado natural de esas expectativas que no son reales es la desilusión cuando nos enfrentamos a las realidades de la vida (insulto, injuria, rechazo). Ciertamente, podemos sufrir si mantenemos esas expectativas no realísticas, pero mucho de ese sufrimiento es innecesario y puede ser corregido con la perspectiva y pensamiento bíblico correcto. Jesús mismo dijo que en este mundo tendríamos problemas, pero podemos aún experimentar gozo al confiar en Él y caminar en la verdad día a día.
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Referencia Bíblica: La encarnación fue un acto de pre-existente Hijo de Dios, asumiendo voluntariamente un cuerpo y naturaleza humana. Sin cesar de ser Dios, él se hizo un ser humano, el hombre llamado Jesús. Él no abandonó su deidad para hacerse humano, pero puso de lado su derecho a su Gloria y poder. (Estudio Bíblico de Aplicación para la Vida, Life Application Study Bible)
Piénselo: A pesar que Jesucristo era la Deidad Creadora, por el cual todas las cosas fueron hechas, como hombre Él se humilló a sí mismo – puso de lado sus prerrogativas divinas y caminó en esta tierra como un hombre – una demostración perfecta de lo que Dios diseñó para el hombre – toda la personalidad sometida y ocupada por Dios para Sí mismo. (Ian Thomas)
Lea “Sirviendo a Jesús al Servirnos Unos a Otros” para ideas adicionales para la aplicación de esta lección.
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
En Filipenses 2:5-11 se encuentran algunas de las palabras que se hayan una vez escrito. Son tan hermosas, que ellas no se encuentran allí sin relación al resto de la epístola. Ellas cuadran en el contexto comenzando en 1:27, siguiendo a través de los capítulos 2-3 hasta to 4:3. Pablo toma la mayoría de su tiempo en el resto de esta carta exponiendo lo que él quiere decir en 1:27: “que os comportéis como es digno del evangelio de Cristo y estad firmes.” ¿Cómo? En un espíritu, en un mismo sentir, unidos, sirviendo unos a otros. Jesús es presentado como el ejemplo perfecto de un siervo. El ejemplo de Jesús debería motivarnos a tener corazones de siervos. No sólo servir unos a otros, pero la atención debe ser puesta en servir a Jesús a través del servicio de los unos a los otros. Esto es mencionado claramente en 2 Corintios 4:5. Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros como vuestros siervos por amor de Jesús. Eso sería un servicio gozoso. Esto naturalmente lleva a tres preguntas: 1) ¿Quién es Jesús, y por qué él es digno de ser servido? 2) ¿Cómo Jesús es el ejemplo perfecto de un siervo? y 3) ¿Qué significa servir a Jesús a través del servicio de los unos a los otros?
Esta, por supuesto, es una pregunta muy importante. Una respuesta apropiada es esencial pata su fe y la mía. En nuestro pasaje de hoy, alguien llamado Jesús recibe la adoración que sólo pertenece a Dios. Una de las objeciones hechas en contra del cristianismo a través de los siglos es que nosotros adorados a 3 Dioses: el Padre, Jesús y el Espíritu Santo. ¿Creen los cristianos en más de un Dios? No. Enfáticamente, la Biblia enseña que hay un solo Dios. (Véase el diagrama a la derecha)
Jesucristo es Dios en su naturaleza divina eternal. Nuestro pasaje de hoy iguala a Jesús con Dios. Jesucristo es verdaderamente y totalmente humano, pero sin pecado. La segunda persona de nuestro Dios triuno tomó la naturaleza y cuerpo humano cuando fue concebido por el Espíritu Santo en el vientre de María. Así que, ¿qué creen los cristianos sobre Jesucristo? (Véase diagrama a la derecha).
En los primeros 200 años después de la muerte de Cristo, varias herejías surgieron que disminuían la deida de Jesús o su humanidad. No es tan diferente como lo que sucede en nuestros días. La iglesia primitiva llegó a un acuerdo sobre este punto en el año 325 en el Concilio de Nicea, un pueblo de la Turquía moderna. Por ello, este acuerdo es llamado el Credo de Nicea (vea al final de este ensayo). Desde entonces, se ha mantenido como una representación certera de la enseñanza bíblica. En otro concilio, 125 años después, la humanidad y divinidad de Jesús fueron establecidas por completo. Desde entonces, cristianos de todas las denominaciones – protestantes y católica – coinciden en estos dos puntos. Dios es uno en esencia, tres en persona; Jesucristo es completamente Dios y completamente humano.
¿Quién es Jesús y por qué es digno de servicio? Él es Dios. Esto nos lleva a nuestra próxima pregunta.
Él es nuestro ejemplo perfecto, porque Él ilustra en sí mismo las cuatro características de un siervo verdadero.
A pesar de ser Dios, Él no se estimó esta posición como algo que Él no podía dejar. Así, Él se hizo nada. Él se derramó a sí mismo y se dio a sí mismo. Lo opuesto a usar sus atributos divinos para su propia ventaja. ¿Cesó Él de ser Dios? No. como Dios, Él no podía y no abandonó sus atributos o naturaleza. Pero, Él dejó a un lado Su Gloria y el uso independiente de Sus propios atributos como Dios. Él eligió aceptar las limitaciones humanas – tanto en cuerpo como en la naturaleza del hombre – y vivir en esta tierra dependiente de la voluntad de Dios el Padre. Él necesitaba hacer esto por nosotros, para llenar nuestra necesidad. Esto es lo que las escrituras dicen en Hebreos 2: 14, 17 - Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también, participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía al imperio de la muerte, esto es, al diablo…Por lo cual debía ser en todo semejante a sus hermanos, para venir a ser misericordioso y fiel sumo sacerdote en lo que a Dios se refiere, para expiar los pecados del pueblo.
Filipenses 2:7 describe a Jesús como un siervo, o de forma más específica, un esclavo—alguien en servicio o esclavitud a alguien. Puede ser voluntario o involuntario. Jesús no pretendía ser un siervo. Él no estaba actuando un rol. A través de los evangelios, o vemos sirviendo a otros voluntariamente. A mujeres como nosotras, cuando aún estaba en la tierra, Jesús demostró que las amaba al servirles.
¡Y mujeres que le conocieron lo amaban! ¿cierto? ¡Y querían servirle! Las mujeres de los días de Jesús respondieron a Su ejemplo y amor al hacer lo mismo. ¿Sabía usted que un gran número de mujeres que viajaron con Jesús, ayudaban a apoyarlo y a sus doce discípulos hambrientos con sus propios recursos? Leemos en Lucas 8: 2 y 3. Ayudaban con lavar y también con la cocina en el camino. Ella lo amaban.
Jesús es nuestro siervo aún – Él es nuestro sumo sacerdote, intercediendo por nosotras en oración. Lo vimos en los versículos de Hebreos. Un comentador dijo que esto no significa que debíamos demandar de Él diciendo: “arregla esto y aquello.”
Su naturaleza humana murió; su naturaleza divina no lo hizo. Él hizo esto por nosotras, con el gozo de nuestra redención en mente.
Hebreos 12:2 nos dice que, con el gozo de nuestra redención y Su glorificación delante de Él, Jesús soportó la cruz. Y, Él llevó al cielo Su cuerpo humano glorificado. ¿Sabías eso? Cuando veamos a Jesús, ¡Él será como uno de nosotras! Jesús fue el ejemplo perfecto para nosotras de un siervo verddero y gozoso. Ahora, la tercera pregunta.
Pablo dice en Filipenses 2:5 que nuestro pensar, debe ser el mismo que el de Jesús. Debemos servirnos los unos a los otros, como Él lo hizo por Su Cuerpo, la Iglesia. La iglesia universal como el Cuerpo de Cristo no es una organización, pero es algo vivo. Trasciende todas las culturas, lenguajes, y límites geográficos y políticos. El saber que formamos parte de esta iglesia, nos da razones radicalmente diferentes para comportarnos bien – razones como el preservar y motivar esa unión entre los creyentes producto de la presencia del Espíritu Santo en cada una de nosotras. Lo que hacemos cada una de nosotras afecta positiva o negativamente a otros miembros de este organismo, el Cuerpo universal de Cristo representado en nuestra iglesia local.
Es muy fácil el pensar en la iglesia de la misma forma que lo hacemos con otra organización o un negocio – como un consumidor. Buscamos la mejor iglesia con la expectativa de que cuidarán de nuestros hijos, que nos divertiremos, algunas veces dejar un poquito de dinero, y luego salir de allí para nuestras actividades comunes. La iglesia es un organismo viviente, no un negocio. Dios diseñó a a Iglesia para depender de miembros individuales sirviendo los unos a los otros.
¿Cómo servimos a Jesús al servirnos los unos a los otros? ¿Qué significa ser siervos gozosos? Vamos a ver el ejemplo de Jesús.
Debemos consideras a otros como dignos de tratamiento preferencial. Las escrituras no dicen que no debemos buscar los intereses propios, pero al hacerlo, debe haber una preocupación igual o mayor por los intereses de otros. El ser siervos incluye el cuidar de nosotros mismos, para que así podamos dar más efectivamente a otros en servicio a Jesús. Esto incluye descanso, nutrición, ejercicio, recreación, una ducha, y un retiro ocasional. Estas son cosas que nos benefician. Una dama GOZOSA comenzó un programa de dieta y ejercicio para ella misma, para que así pudiera servir a Jesús con mayor energía. Cuando Dios la llamara para hacer algo, ella quería estar lista físicamente para hacerlo.
Jesús tenía privilegios como Dios, reinando sobre el universo. Pero Él no consideró su equidad con Dios como algo egoísta a lo cual aferrarse. Él pensó en nosotros y en nuestras necesidades. Él lo hizo para que no tuviéramos que continuar viviendo vidas egoístas. Él nos ha dado la capacidad de ser orientados a las necesidades de otros. Todas esas cosas que se enumeran en Fil. 2:1 son nuestras. Se nos ha cuidado ricamente para que no tengamos que estar pensando sobre nosotros todo el tiempo. En cambio, podemos concentrarnos en los otros: sirviendo a Jesús al servirnos los unos a los otros, tal como Él hizo. Y, esto incluye a todos, aún a los que están en liderazgo. Jesús enseñó esto a sus discípulos en Mateo 20:25-28. La Iglesia debe tener una mentalidad totalmente diferente a la del mundo. Jesús es nuestro ejemplo en esto.
De acuerdo a 2 Corintios 4:5, si yo tengo la mentalidad de un siervo, es así la forma en la que debo pensar: “Yo me entrego a Cristo para ser un siervo, para que use lo que soy y lo que tengo para la Gloria de Dios y para el bien de otros.” Romanos 12:1 nos dice que debemos tomar nuestra vida común – dormir, comer, ir al trabajo, y haciendo las cosas de la vida – y colocarla ante Dios como una ofrenda. Este es nuestro acto espiritual de adoración. La palabra griega usada aquí, generalmente se refiere a aquellos quienes servían en el Templo, dedicados al servicio de Dios, aquellos quienes estaban sirviendo y adorando a Dios al mismo tiempo. Nuestro servicio es una extension de la adoración que rendimos a Dios.
Una palabra con un significado similar, pero aplicada específicamente a las mujeres, se encuentra en Tito 2:3-. Las mujeres ancianas (en edad, madurez, experiencia) deben ser reverentes en su comportamiento. Esto no significa que debe actuar como una monja todo el tiempo. La palabra griega traducida reverente es similar a aquella que se refiere al acto espiritual de adoración en Rom. 12:1. Nosotras, como mujeres, debemos servir en el templo de nuestro Dios – el templo de nuestros propios cuerpos. Dios no habita en edificios. Él mora en la gente. Por lo tanto, no hay una división: sagrado/secular en la vida de una mujer. Lo que usted hace en la iglesia no es más sagrado que el servicio de cuidar por su familia y hogares. Todo lo que usted hace es servicio a Dios en Su templo – su cuerpo. Si nosotras servimos a Jesús como Señor, entonces el servir a otros se desarrollará como algo muy natural en la vida. Los trabajos rutinarios en la casa ya no son tareas aburridas; en cambio, son oportunidades de servirnos unos a otros en amor. Usted está libre porque usted sirve de forma voluntaria. Tal como lo hizo Jesús.
“Aprendemos una relación – una actitud hacia la vida, una postura -de servicio delante de Dios, y luego estamos disponibles para ser de uso a otros en actos de servicio… ¡Un siervo cristiano es la persona más libre en la tierra!” (Eugene Peterson, A Long Obedience in the Same Direction (Una Larga Obediencia en la Misma Dirección), páginas 66, 68)
¿Qué cuenta como servicio? Primero, en el hogar, al cumplir con las necesidades de su familia. En 1 Timoteo 5:10, Pablo describe las buenas obras de las mujeres, incluyendo “Criar hijos (no solo los hijos propios, sino aquellos niños en tu esfera de influencia), practicar la hospitalidad (esto debe incluir servicio a los extranjeros también), lavar los pies de los santos (tareas del día a día en la iglesia, ayudar a otros cristianos) socorrer a los afligidos y practicar toda buena obra.” Nótese que la lista cubre muchas áreas de la vida y practicamente todas las áreas de servicio en la familia de creyentes, como fuera de ella, en su vida diaria, usted puede motivar a otros a tener la perspectiva de Pablo de “vivir es Cristo.” ¿Se da cuenta que parte de ello es permitir que otros le sirvan a usted? Déjeles tener el gozo.
El punto de servicio es Jesús, no el ganar favor con Dios o con otras personas.
“El verdadero servicio siempre encuentra su fuente en el amor a nuestro Salvador, el querer escuchar Su Palabra, y luego obedecer prontamente. Mientras escuchamos al Señor en la fe con un corazón dispuesto, Él puede usarnos y producer en nosotros Su fruto.” (Cynthia Heald, Becoming a Woman of Grace (Ser una Mujer de Gracia), p. 79)
En Juan, capítulo 12, está la Hermosa historia de María de Betania ungiendo a Jesús con lo más Preciado que ella poseía – un frasco de nardos costosos. Su acto de servicio fue motivado por su amor a Jesús. Esto sirve como un ejemplo a nosotras, sobre cómo servir a Jesús con nuestros corazones. Nosotras no podemos servirle físicamente hablando, pero podemos servirle a través del servicio a Su cuerpo, la Iglesia.
El autor Warren Wiersbe hizo esta notación en su comentario sobre Filipenses:
“Muchas personas están dispuestas a server a otros, si no les costase nada hacerlo. Pero si hay un precio alto que pagar, repentinamente pierden interés. ¡Jesús fue obediente hasta la muerte – aún la muerte de cruz!” (Warren Wiersbe, Be Joyful (Sed Gozosos), p. 63)
Él llega a llamar esto una mente sumisa. Wiersbe dice que la mujer con una mente sumisa no evita el sacrificio. Ella vive por la gloria de Dios y el bien de otros; y si pagar un precio honra a Cristo y ayuda a otros, ella está dispuesta a hacerlo. Wiersbe continúa diciendo, “sacrificio y servicio van de la mano, si el servicio es un ministerio cristiano verdadero.” Ese servicio verdadero cuesta algo. ¿Qué opine usted al respecto?
¿Se da cuenta usted que los humanos están más listos a aceptar ideas que les cuesta algo? Los líderes de cultos saben esto bien. Los comunistas lo saben. Cuando reclutan a hombres, los comunistas les piden hacer algo que les cueste. La voluntad de sacrificio era uno de los factores más importantes en su éxito. Era lo que atraía y mantenía a jóvenes en el movimiento así como a extremistas, quienes luchaban por su causa asesinando gente inocente. ¡Cuánto más grande y beneficioso es la causa de Cristo! Los líderes cristianos sabios saben que es necesario el sacrificio para que haya verdadero crecimiento y ministerio. El servicio no es siempre fácil.
Hay una diferencia entre sacrificio y sufrimiento. El sufrimiento es usualmente impuesto sobre usted por la acción de otra persona. El sacrificio es algo que usted está dispuesto a dar. La mente humilde no habla mucho sobre cuánto se sacrifica, sino cuánto se recibe del Señor. Y, usted, no se queja. La queja no tiene lugar en un sacrificio voluntario. Vivimos en una nación de gente que se queja. En cada lugar que vamos escuchamos quejas. Los siervos gozosos no son así. El hacer un trabajo y luego quejarse del mismo no es servicio.
Jane Austen, autora del siglo diecinueve, escribió novelas que eran comentarios humorescos de los comportamientos sociales de su tiempo—Pride and Prejudice (Orgullo y Prejuicio), Emma, Sense and Sensibility (Sentido y Sensibilidad), y Persuasion (Persuasión). En esta última obra, ella dibuja un marcado contraste entre los aquejumbrados y los siervos verdaderos representados en tres hermanas. La mayor es orgullosa y no trata de servir a nadie sino a ella misma. La más joven se queja continuamente de cuidar a todos, pero sin recibir respeto de nadie. Actualmente, ella se queja constantemente y gasta más tiempo en tratar de llamar la atención hacia sí misma que en servir a alguien. La hermana del medio, Anne, es una sierva verdadera, cuidando gozosamente de otros, sin llamar la atención hacia ella. La única que experimenta gozo es aquella que pasa menos tiempo pensando en sí misma y en sus propias necesidades.
El decir no a algunas cosas está bien – para ser más efectivos en lo que estamos hacienda. Algunas tareas o situaciones en el ministerio deben ser eliminadas o cambiadas porque no sin una forma efectiva de servir a Cristo. Como hermanas en Cristo, partes del Cuerpo de Cristo, conociendo cómo nuestras acciones afectan a otros en el Cuerpo, necesitamos hacer esto de la forma correcta. Hay una diferencia entre quejarse y el ver un problema y trabajar hacia una solución (Véase Sirviendo a Jesús, al Servirnos Unos a Otros, segunda parte.) he aquí una forma distinta de pensar: “Florece donde estás plantada y regocíjate a lo que Dios está haciendo en vez de quejarte sobre lo que Dios (u otra persona) no hizo.” Siervos gozosos están dispuestos a sacrificar.
Romanos 15:1-7 es un pasaje paralelo a la lección del día de hoy. Pablo exhorta a los creyentes a ser pacientes los unos con los otros, tratando de complacer al otro, aceptar al otro, y buscar la unidad con el otro para que así, “unánimes, a una voz, glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo.” Nosotras somos representantes del Dios vivo, viviendo, respirando, andando y hablando. Nosotras somos cartas vivas al mundo alrededor nuestro. Nosotras decimos la verdad sobre Dios en la forma en la que vivimos y en lo que decimos. Y esto, glorifica a Dios.
Un día, todas nosotras estaremos arrodilladas ante Él confesando que Él es Señor. Por supuesto, esto es posible hacerlo hoy, y recibir Su don de salvación. Si usted nunca ha hecho esto antes, ahora es el tiempo perfecto. Ahora que usted conoce quién es Jesús, usted puede hablar con su líder sobre cómo confiar en Él.
El servirnos los unos a los otros no es el gol primario, sino server a Jesús. Los otros son un medio. Él es la fuente de gozo. Por tanto, podemos ser siervos gozosos para Él. El servir a Jesús es algo que viene del corazón, no es una tarea. Los siervos gozosos sacrifican voluntariamente y no se quejan al hacerlo. Pregúntese: ¿Cómo estoy sirviendo a Jesús? El verdadero servicio cristiano es divertido para usted. Y le da gloria a Él.
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Note la terminología que Pablo usa en el Versículo 12: “ocupaos” en vuestra salvación; no “ocuparse para” o “ocuparse para mantener” su salvación. La gracia de Dios es absoluta e ilimitada, y la obra de salvación a través de Jesús es completa y consumada para siempre (véase Juan 10:27-30 y Efesios 1:13, 2:8,9). Nosotros no hicimos nada para alcanzar nuestra salvación, pero debemos hacer algo para exhibirla. Podemos poner a trabajar o usar, lo que Dios ha colocado en nosotros.
Referencia Bíblica: Una ofrenda de bebida consistía en vino derramado sobre el altar como un sacrificio a Dios (véase Génesis 35:14; Éxodo 29:41; Números 28:24)
¡Piénselo! Aún si tuviese que morir, Pablo estaba content, sabiendo que él había ayudado a los filipenses a vivir para Cristo. Cuando usted está totalmente comprometido a servir a Cristo, sacrificando para construir la fe de otros, esto trae un galardón gozoso. (Life Application Study Bible)
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Referencia Bíblica: Pablo aconseja a la iglesia a honrar a Epafrodito, por su sacrificio y servicio. Cristo obtiene la gloria, pero no hay nada de mal que un siervo reciba reconocimiento. (Lea 1 Tesalonicenses 5:12-13.) No hay contradicción entre Filipenses 2:7 (“se despojó a sí mismo”) y 2:29 (“tened en estima”). Epafrodito fue de bendición a Pablo y a su propia iglesia, y ¡también es una bendición a nosotros hoy! Él nos muestra que una vida gozosa es la vida de sacrificio y servicio… Él y Timoteo juntos nos motivan a someternos al Señor, y los unos a los otros, en el Espírito de Cristo. Cristo es el Patrón que seguimos. (Warren Wiersbe, Be Joyful (Sed Gozosos), p. 87)
Filipenses 2:19-30 nos da una idea sobre tutoría. En el caso de Pablo, el ser mentor de jóvenes con menos experiencia, resultó en la bendición de compartir la cantidad de trabajo del ministerio y crecer más cerca al Señor juntos.
Piénselo: Si queremos impactor vidas tal como lo hizo Jesús, daremos a las personas oportunidades para crecer, y luego motivarles cuando ellos fallan. Esto significa tomar el tiempo para orar con ellos, entrenarlos, y motivarlos. Algunas veces esto significa verlos caer la primera vez que emprenden una nueva tarea….Que el miedo no nos detenga. Seamos más como Jesús, veamos a las personas de la forma que Él las vió – gente con gran potencial. (Adaptado de Becoming a Woman of Influence (Convirtiéndose en Una Mujer de Influencia) por Carol Kent)
Lea “Comunión entre Damas con Bendición” para una mayor explicación de esta lección.
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
En esta carta, Pablo les dice a los creyentes filipenses, y a nosotras, tener una misma mente, unidas en amor, unidas en propósito porque ya somos una en el Espíritu. En otras palabras, Pablo les dice: “Ustedes han sido unidas, así que permanece de esa forma.”
Él nos dice que podemos estar unidas cuando seguimos el ejemplo de sumisión y servicio, cuando consideramos a otros mejores que nosotras mismas y buscamos el interés de otros de la misma forma que buscamos nuestros propios intereses. Pero esto apremia un estilo de vida radical, opuesto a lo que nuestra cultura occidental nos enseña – yo, yo, yo. “No pises mis derechos de conseguir placer.”
Podemos preguntarnos a nosotras mismas algunas preguntas para hacernos pensar sobre nuestras actitudes hacia nosotras mismas y hacia otros a la luz del ejemplo de Cristo.
Pablo dice que debemos tener la misma actitud de Jesús. Y, la buena noticia es que podemos tener esta actitud de servicio, porque Dios está haciendo su obra en nosotras. No por nuestro propio conjuro; nosotras somos colaboradoras con Él para lograrlo.
En la próxima declaración Pablo ataca la yugular – dos actitudes que son expresadas verbalmente que pueden dividir la unidad de la misma forma que la Falla de San Andrés divide California – murmuración y argumentaciones.
Usted conoce muy bien que nosotras las mujeres tenemos una tendencia fuerte a quejarnos, a portarnos de forma malcriada, y discutir, y nuestras relaciones sienten a menudo el dolor de nuestras actitudes “malagradecidas” y “descontentas.”
Pablo compara estas actitudes con los ejemplos de Timoteo y Epafrodito, con quienes compartió amistades de bendición. Sin quejas o celos. Relaciones humanas de calidad. Pablo y Timoteo como Padre e Hijo; Pablo y Epafrodito como hermanos. No puedo hacer otra cosa sino pensar sobre relaciones como damas: madres e hijas, y entre hermanas. Todas somos hijas, la mayoría de nosotras somos de ser madres, y todas somos hermanas, bien sea por lazos familiars o a través de Cristo. Y muchas de nosotras hemos sido bendecidas con el privilegio de criar hijas.
¿Cómo podemos nosotras las mujeres, brillas como estrellas entre una generación de mujeres amargadas, infelices y algunas veces pervertidas? ¿Cómo criamos a nuestras hijas? Esto me trae de vuelta a un tema del cual hablé bastante hace unos años atrás – la amistad entre mujeres. El Señor me ha dado vislumbres maravillosos y así estuve buscando en mis notas y saqué de ellos lo que era apropiado para aplicarlo a la lección de hoy.
Tenemos un don especial de Dios, nuestro diseñador, que la mayoría de los hombres no tienen – el don de relacionarnos, para cuidar y compartir. Y por ello hay una motivación en nosotras para relacionarnos, especialmente con amigos cercanos.
Aquí hay una porción de Anne de Green Gables que expresa el deseo de una chica por un amigo:
“Marilla, crees que nunca tendré una amiga querida en Avonlea?”
“A—a, ¿qué clase de amiga?”
“Una amiga querida – una amiga íntima, ya sabes – un alma gemela a la cual pueda confiar mi alma. He soñado con tener una amiga así toda mi vida.
Nunca supuse que debía. Pero, hay tantos deseos que se han hecho realidad que quizás, éste también ocurra. ¿Crees que sea posible?”
“Diana Barry vive en Orchard Slope y ella tiene tu edad. Ella es una niña Buena, y quizás ella pueda jugar contigo cuando ella venga a casa.”
Anne conoció a Diana, ellas juraron amistad eterna, y Anne fue a casa la niña más feliz del mundo. (Anne de Green Gables por L. M. Montgomery)
Las niñas necesitan amigas. Cuando las jóvenes se convierten en mujeres, aún necesitan amigas. Dios, nuestro Creador, nos diseñó de esta manera. Él nos hizo para relacionarnos entre sí para que podamos responder a aquellos a nuestro alrededor, para cuidarlos, comunicarnos con ellos, y estar en sintonía con sus necesidades. Él nos dio un manual de instrucciones para que supiéramos como usar de la mejor forma este don de cuidado y hospitalidad. La Biblia es nuestro texto de estudio para vivir. A medida que descubrimos más sobre el GOZO, vemos como lidia con cada aspecto de nuestras vidas, incluyendo la clase de amistades que Dios desea que tengamos. A través de las Escrituras, Él enseña a Sus hijos cómo ser un amigo y cómo escoger amigos.
El patrón de Dios para la amistad se puede desencadenar, así como el canal del don de una mujer para cuidar a otros. Tiene sentido que, Dios quien nos ha creado con la habilidad de llevar a un bebé bajo nuestros corazones y amamantarlos tiernamente, nos equipe con la habilidad de anhelar y responder a las necesidades de aquellos más vulnerables. Sí, las mujeres tienen un don dado por Dios para cuidar y compartir que puede ser usado para bendecir al mundo, o para arruinar cruelmente el mundo de alguien. Desde que somos pequeñas, tratamos de rodearnos con amigos. Lo que aprendemos en nuestra niñez influye en nuestras relaciones como mujeres adultas.
Los chicos pueden tener amigos con frecuencia, pero parecen estar más absortos en sus actividades que en ellos mismos. Los hombres también, hacen cosas juntos, usualmente lado a lado, metidos en una actividad, mientras que las mujeres se relacionan cara a cara.
Una chica puede sentarse en la cama de su amiga, susurrando y riendo, preferiblemente con la puerta cerrada para que nadie escuche sus secretos. Ellas están absortas en sí mismas. Prefieren dormir juntas para continuar hablando y riendo. Usualmente se muestran cariño públicamente, tanto físicamente como al tomarse las manos, y también verbalmente a través de notas de cariño, que reafirman lo especial que son unas a otras. Las chicas son generalmente, más cercanas las unas a las otras, que los chicos.
Ellas demandan una intensidad de cercanía y lealtad. Las mujeres cuidamos bastante de nuestros sentimientos hacia otras personas, y ¡esto comienza desde el jardín de infancia! Y cuando dejamos nuestros días de la niñez atrás, esperamos que nuestras amigas mujeres compartan cono nosotras desde su corazón y nos nutran con expresiones de afecto. Nos desanimamos cuando una amiga cercana no lo hace.
Hay un anhelo por una Amistad cercana. La definición de Anne era,
“ Una amiga querida – una amiga íntima, ya sabes – un alma gemela a la cual pueda confiar mi alma. He soñado con tener una amiga así toda mi vida. “(Anne de Green Gables, p. 58).
Ahora bien, no hay nada de malo cuando se anhela por una Amistad, pero este deseo de cercanía e intimidad puede ser peligrosa.
Estudios muestran que las niñas tienen una tendencia de actuar directo a la yugular. Las chicas no patean o muerden, como regla general, pero los lanzamientos verbales y las flechas que envían unas a las otras en sus actos de venganza sin misericordia, son a menudo más dolorosos. Dos niñas que están de brazo en brazo un día, pueden de repente, al día siguiente, volverse una contra la otra, soltando insultos crueles en un lugar donde todos pueden escuchar. Las heridas pueden que no sanen en meses, o quizá nunca. Las niñas tienen la tendencia, más que los varones, a dibujar un círculo y dejar a otros afuera, hiriéndoles profundamente ¡y sin importarle!
Si las necesidades de una niña son satisfechas en una Amistad o en un círculo de amigos cercanos, ella no quiere que eso sea amenazado por ninguna otra persona, ya que la identidad femenina está tan unida a relaciones, es natural el querer guardar esas relaciones con un círculo estrecho – aun cuando el efecto secundario sea traición o crueldad. Puede que sus hijas hayan ya experimentado esto.
O, ustedes las madres, han sido víctimas de esta clase de heridas también. Ustedes conocen la rutina:
El deseo intenso y natural de una chica de ser aceptada, le da una tendencia hacia la crueldad. ¡Chicas nuevas amenazan su círculo de dos! Las niñas, más que lo varones, son amenazadas por cualquiera que quiera cambiar aquellas relaciones que le dan seguridad y auto estima. Si ella necesita ser cruel hacia otra persona para asegurar su propia posición, lo hará.
Cuide los libros que algunas de las pequeñas niñas están leyendo. Algunos autores tratan de dibujar el lado oscuro de las jóvenes en sus escritos, haciendo que las crueldades suenen graciosas, estableciendo un patrón para el chisme, el comportamiento hipócrita, y pesar del “final feliz” del libro, es muy tarde para redimir el daño hecho a las jóvenes lectoras. ¡Las niñas no necesitan inspiración en el área de traición de un autor adulto! Lo que ellas leen pueden afectar seriamente su propio pensamiento y comportamiento.
El relacionarse en un comportamiento que se aprende. Aprendemos a cómo relacionarnos con otras personas, al ver cómo otros se relacionan con nosotros y con otros. Madres, ¿qué clase de modelos están influyendo a sus hijas en sus relaciones? ¿Cambiamos cuando nos convertimos en mujeres? ¿Dejamos de tirar dardos? ¿Dejamos de masticarnos las unas a las otras? Hollywood no cree que sea así, basado en lo que vemos en la Tv y en las películas.
El mundo de grupos de damas es a menudo un refinamiento de la crueldad de las escuelas elementarias. Nos hacemos más discretas que cuando éramos niñas: escogemos el chisme y la hipocresía en vez de los gritos en el parque. Algunas mujeres han sido tan heridas por otras mujeres que no desean amistad con personas de su propio género, negando su necesidad de una amiga y dejando de lado los beneficios. A pesar que nos volvemos más tiernas de carácter con la madurez, y ciertamente en Jesucristo, aún estamos propensas a infligir heridas a otras personas, quizá de forma inconsciente. ¿Cuáles son algunas de las armas usadas para infligir heridas?
“El que anda en chismes descubre el secreto; mas el de espíritu fiel lo guarda todo” (Prov. 11:13)
La palabra hebrea usada para chisme en este versículo, significa “viajar” con cosas confidenciales. Eso es lo que exactamente es. Ciertamente no es una comunicación de amor; en vez se incluye la traición, ya que usted está compartiendo un secreto que ha debido permanecer es su propio corazón. ¿Correcto? Murmuraciones.
¿Por qué somos tentadas a ser infieles? Por nuestro gran deseo de unión que el fuego del chisme provee. Lo mismo se aplica a las quejas. Uno se siente conectada con la persona con la cual ha compartido su opinión.
“El hombre perverso levanta contienda, y el chismoso aparta a los mejores amigos.” (Prov. 16:28)
Esta palabra hebrea usada para chisme significa “rodar en pedazos”. Esto me hace recordar el tomar algunas piezas de galletas, colocándolas en una bolsa ziploc, y usar un rodillo para aplastarlas. Rodándolas en pedazos. Si mi hablar es hacer rodar a una persona en pedazos, entonces estoy chismoseando.
A pesar que los varones chismean, las mujeres lo hacen más.
Las mujeres no solo usan el chisme, sino el ataque directo verbal. Usted sabe de qué estoy hablando. También lo hace Pablo – disputas/argumentos. Pablo incluso les indica a las mujeres a parar sus disputas en el capítulo 4. Hasta que aprendamos a encontrar nuestra seguridad solamente en Jesucristo, tendremos problemas en esta área. Porque somos mujeres. Nosotras tenemos un gran deseo de conexión, para llenar nuestra necesidad de seguridad y autoestima.
“Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes.” (Efesios 4:29)
Esta escritura debe ser aprendida por cada mujer desde el momento que ella aprende a hablar.
Entonces, ¡Tenemos el comportamiento que hace florecer los celos! Los novelistas, a menudo, muestran a las mujeres como más celosas que los hombres. Probablemente lo somos. Quizá nuestra baja autoestima nos hace más vulnerables, por ejemplo, al pecado de regocijarnos en la poca fortuna de otros. ¡Qué desamoroso! Tanto los hombres como las mujeres luchan con sentimientos de celos, pero las mujeres son más aptas a expresarlos.
En Proverbios 27:4, Salomón dice: “Cruel es la ira e impetuoso el furor. Mas ¿quién podrá sostenerse delante de la envidia?”
Si usted alguna vez ha sido víctima de la envidia, usted ha probado la crueldad. Piense sobre todos los caracteres en los cuentos de hadas – la madrastra de Cenicienta, la reina malvada de Blanca Nieves y otras. Todas sus acciones son motivadas por envidia. La envidia dice: “Podría perdonarte lo que fuera, excepto que no soy lo que tú eres.” La envidia disminuye a ambas partes: hiere a la víctima y le da un espíritu duro y amargo al perpetrador.
“El corazón apacible es vida de la carne; mas la envidia es carcoma de los huesos.” (Prov. 14:30)
Recuerda la historia del Rey Saúl y Jonatán, su hijo, el mejor amigo de David, rival de Saúl. Saúl era el rey, pero solía complacer a la gente para que así no fuera causa de comparación y crítica. Jonatán era el próximo a heredar el trono, pero él complacía a Dios. Él sintió que complacía a Dios, cuando él exaltaba a David.
Quizá la clave es: “cuando sentimos placer en Dios (Filipenses 2:13), no importa cómo Él elija obrar con nuestros hermanos y hermanas.” Dios es complacido cuando podemos conquistar la envidia y regocijarnos con un amigo exitoso.
Entonces, ¿Cuál es la respuesta? Por un lado, debemos escoger cuidadosamente a nuestros amigos y aprender cómo ser buenas amigas. Además, no podemos dejar que nuestros hijos hagan amigos al azar – bien sea un vecino, un compañero de clases, o cualquier otro conocido – sin algún entrenamiento sobre cómo ser un buen amigo. ¿Qué le ocurre a nuestras hijas? El instinto natural de tener cercanía puede corromperse fácilmente por la naturaleza del pecado a una actitud cruel de una niña a la otra.
El comportamiento cruel puede ser cortado desde el primer momento. ¡Ahora mismo! ¡Con nosotras, como mujeres, con nuestras hijas, temprano en sus vidas! Las mujeres y jóvenes cristianas pueden ser distintas. ¡Y deberían serlo! Pablo dice brilla como las estrellas, y nosotras podemos ser estrellas que brillan-en-la-oscuridad, sin culpa y sin reproche, brillando en un mundo que espera que las mujeres sean consentidas, engañosas, malcriadas, chismosas.
¿Qué clase de Estrella quieres ser? ¿Una estrella blanca, brillante como Polaris – cuántas de ustedes han visto la Estrella del Norte? Por siglos hombres han usado esta estrella para hallar su camino. ¿O una supernova – puro espectáculo por fuera, pero actualmente una estrella que se ha desintegrado?
¿Cómo aprendemos a ser buenas amigas? ¿Cómo podemos satisfacer de forma apropiada este deseo de conexión?
Enseñemos estos versículos en Filipenses 2 y otros como estos a nuestras hijas, y afirmarlos año tras año en sus relaciones con otros niños. Esta tendencia hacia un comportamiento cruel e irritante no tiene por qué ser inevitable. ¡Puede ser cambiado! Así como la muerte no es natural, tampoco lo es este comportamiento. ¡Dios no creó originalmente a las mujeres de esa forma!
A través del poder el Espíritu Santo, quien nos da actitudes como Cristo (pensamientos y actitudes de amor), produciendo en nosotras acciones como las de Cristo (palabras y hechos de amor), ese instinto de cuidado puede ser manejado en la dirección correcta, hacia todas las niñas que se relacionan con su hija. Hacia las mujeres con las que la madre frecuenta. Beneficiando a otras. Ser una amiga cristiana que protege y es cálida es un comportamiento aprendido.
Y, madres, ellas aprenden muchas de sus habilidades en relaciones de nosotras. ¿Cómo tratamos a nuestras hijas? ¿Cómo ellas nos ven la forma en la que tratamos a otras damas? ¿Qué nos escuchan decir en la privacidad de nuestra propia casa, cuando hablamos sobre mujeres que son nuestras amigas, o conocidas, o hermanas en Cristo, o compañeras de trabajo? ¿Cómo tratamos a las mujeres que se acercan a nuestro grupo de Estudio Bíblico como visitas? ¿Hay un aire de exclusividad entre las mujeres de esta iglesia? Si lo hay, y lo has sentido, hazle saber al líder del grupo inmediatamente. ¿Qué dice una persona nueva, o una persona tímida, o una mujer de una situación de soledad?
Está bien, las niñas son más cercanas que los chicos, las niñas esperan mucho más de sus amigas, y las necesidades de seguridad para una chica en una relación pueden llevarla a ser cruel. Las mujeres son chicas grandes con la misma habilidad de ser cercanas, de tener las mismas expectativas de lealtad, y que al mismo tiempo necesitan seguridad en una relación con al menos una buena amiga. ¿Cómo podemos satisfacer apropiadamente este deseo de conexión?
Bien, la Buena noticia es que podemos aprender a satisfacer nuestro deseo de conexión a través de jesucristo, porque Él nos enseña a ser fieles y leales. Así como esas estrellas que brillan en la oscuridad necesitan estar expuestas a la luz para poder brillar, debemos ser expuestas nosotras. Y esa luz es Jesús, la luz del mundo, quien brillará a través de nosotras. Nosotras radiaremos Su luz. Brilla en la oscuridad.
El Espíritu Santo nos da actitudes nuevas – Actitudes como las de Cristo (fidelidad y lealtas a Él y a nuestras hermanas)—actuadas en nuevas acciones—Acciones como las de Cristo (siendo fieles en nuestro hablar, diciendo aquello que ayuda, motiva, o bendice a esa persona)—para poder Beneficiar a Otros (ellos son motivados, y ven a Dios en nosotras). Entonces el mundo ve a Dios en nosotros porque la marca del cristiano es el ¡AMOR! ¿Cierto? Y seremos verdaderamente como estrellas en la noche – dando luz y guiando a otros en el camino a Jesús.
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Piénselo: Parece que, por el énfasis repetido de gozarse en el Señor, era esto lo que necesitaban los cristianos filipenses. La mayoría del pueblo de Dios necesita este recordatorio a menudo. Es fácil para los creyentes dejar que las circunstancias los desmotiven. La cura para el desánimo es dirigir la atención hacia el Señor y regocijarse en Él. Es significativo que un prisionero romano instaría al pueblo, el cual estaba libre, de regocijarse en su Salvador. Pareciera que debería ser el caso contrario. Pablo aprendió lo que cada hijo de Dios necesita saber—que ellos pueden regocijarse en el Señor aun cuando las circunstancias son contrarias al Espíritu de regocijo. (The Bible Knowledge Commentary New Testament (El Comentario de Conocimiento Bíblico, Nuevo Testamento), p. 658-659)
Piénselo: “El legalismo exalta la carne y sofoca al Espíritu – la Libertad basada en la verdad sofoca a la carne y exalta al Señor.” (Cynthia Heald, Becoming A Woman of Grace (, p. 58)
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Piénselo: “Pero esto hago …” ¿Cómo terminaría esta frase querido amigo? El famoso predicador D. L. Moody wescribió estas palabras de un erudito llamado Gannett al margen de su Biblia al lado de Filipenses 3:13: “Los hombres pueden ser divididos en dos clases – aquellos quienes tienen ‘una cosa’ y aquellos quienes no tienen ‘una cosa’ que hacer; aquellos con un propósito, y aquellos sin propósito en sus vidas…El propósito en la vida es lo que la columna es para el cuerpo: sin ellos somos invertebrados.” ¡Cuán terrible sería ser “invertebrado” – sin columna, débil, y con una voluntad débil – especialmente en la vida cristiana! Pero gracias a Dios por estos versículos amados e instructivos sobre el proceso por el cual usted y yo podemos conocer y cumplir “una cosa” – obtener el gran premio de la carrera cristiana. (Elizabeth George, Experiencing God’s Peace (Experimentando la Paz de Dios, p. 95)
Lea “Persistiendo Hasta la Meta” para más aplicación de esta lección.
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Las metas en la vida de Pablo habían cambiado a lo largo del curso de sus más de sesenta años de edad. Él declare enfáticamente que antes de llegar a ser un cristiano, su meta había sido ser el mejor judío—#1 hebreo, Jefe de los Fariseos. El curso que había seguido para alcanzar esta meta era estudiar duro, practicar la ley para llegar a la perfección, y eliminar a los cristianos. Él había sido altamente exitoso en ello y estuvo muy cercano de alcanzar sus metas iniciales HASTA que algo ocurrió. Él se encontró con Jesús en una luz enceguecedora en el camino a Damasco. Las metas de su vida cambiaron – no para ser más el fariseo superior, sino para ser como Cristo – conocerlo, entender el impacto real de Su resurrección, compartir en Sus sufrimientos, y enfrentar la muerte de la forma que lo hizo Jesús, para ser resucitado del estado de muerte y dársele un cuerpo nuevo, sin pecado. Todo esto era la nueva definición de perfección para Pablo.
Él sabe que aún no ha alcanzado esta meta aún, a pesar que para cada persona a su alrededor él es un gigante espiritual. Han pasado 30 años desde que él comenzó este viaje spiritual. Si estudia la vida de Pablo, tal como lo hicimos el año pasado al estudiar el libro de Hechos de los Apóstoles, usted ve que él tiene sus altos y sus bajos, y batallas que confrontar.
Pero, Pablo deseaba ser como Cristo con el entusiasmo y persistencia de un corredor en los juegos griegos. Y este es el contexto del pasaje del día de hoy. Correr el curso. La vida cristiana es como correr un maratón en un carril designado. ¿es alguna de ustedes una corredora, o lo ha sido en el pasado? Pablo utilizó esta analogía de una Carrera en varios de sus escritos. Vamos a verlos:
“Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está adelante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.” (Fil. 3:13-14)
Las palabras de Pablo en 1 Cor. 9:24-27 hace surgir las preguntas: “¿Cómo debemos correr?” y “¿Cuál es el premio?” El último se menciona en nuestro pasaje de Filipenses. En 2 de Timoteo 4:7-8, Pablo escribió sobre terminar la carrera—su Carrera. Pablo estaba advertido de muerte inminente. Él había mantenido la fe. Podemos tener una vision del premio que le espera a Pablo y a nosotras.
Entonces, ¿Qué preguntas podemos hacernos?
#1. ¿Cuál es el curso?
#2. ¿Cuál es la meta?
#3. ¿Cuál es el propósito de correrla?
#4. ¿Qué nos desvía del curso?
#5. ¿Cómo nos mantenemos en curso?
#6. ¿Cuál es el premio?
El curso es tu vida como creyente. Es el curso personal que Dios te ha dado como creyente. Es diferente para cada persona y contiene la idea de mayordomía—manejar las cosas de Dios bajo tu cuidado como usted misma, su matrimonio, sus hijos, su dinero o la falta del mismo, sus posesiones, sus talentos, sus habilidades, su habilidad vocal para comunicarse. La lista continua. Escribe su lista. Parte de esa lista puede ser aquello con lo que usted ha nacido por lo cual no toma crédito propio – su genética. Incluya sus dones espirituales. Su curso de carrera incluye todo esto.
A diferencia de un velocista, un maratón es una carrera de resistencia. La meta no está usualmente a la vista. Usted sabe que está allí. La mayoría de los maratonistas corren no con la idea de ganar la carrera, sino con la idea de terminarla. La línea de meta es para el creyente la muerte física. Pablo dice que él ha terminado la carrera porque sabía que iba a morir pronto. A través de Filipenses, vemos que él ha estado listo para enfrentar la muerte física y pasar de la muerte a la vida con Jesús. Él nos recuerda que nuestra ciudadanía está en el cielo, no aquí en la tierra y que deberíamos todos estar esperando impacientemente la venida de nuestro Salvador.
El propósito de correr la Carrera es llegar a ser más como Jesús ´la única perfección verdadera. Y la forma en la que corremos esta carrera es manteniendo la fe. Dios no mide nuestra fidelidad en números exactos. Necesitamos ser fieles en todo los que Él nos da. Estamos aquí en la tierra, a pesar que nuestra ciudadanía está en el cielo. Mientras estamos aquí, debemos vivir una vida de fe- diariamente.
Enseñanzas falsas, el no pasar tiempo en oración y lectura de la Biblia, drenajes emocionales, circunstancias y gente difícil—todo ello puede hacernos desviar del curso. La vida no es estática. Una cosa que he aprendido es no contar que el año próximo será como este año o como el anterior. Al madurar físicamente, nuestros cuerpos cambian; de la misma forma nuestras emociones, prioridades, y aspiraciones. Lo que usted considera importante a los veinte años, es reemplazado con otras actitudes y necesidades en sus 30’s y 40’s.
Tener lástima por uno misma, nos saca del curso. El apartar los ojos de Jesús y lo que tenemos en Él. Pequeñas irritaciones. Malos consejos. Falta de discernimiento. El estar atrapada en el materialism de nuestra sociedad. El no conocer la verdad, y asi nos desviamos por cada filosofía que se cruza en nuestro camino. El pasado – errores pasados. A veces me mantengo en el pasado algunas veces. Porque tengo una tendencia de ser perfeccionista.
¿Hay algunas tendencias perfeccionistas aquí? Esta tendencia manejó mi vida por 19 años. Como Pablo, yo deseaba los estándares más puros de comportamiento, de logros, de premios, sólo por la emoción de ser la mejor. 4.0 en la secundaria, lloraba si sacaba una B. Gané premios en muchas áreas. Sentía que tenía que ser perfecta para ganar la aprobación de mis padres y Dios. Entonces conocí a Jesús.
Por primera vez en mi vida, no tenía que ser perfecta. Mis notas bajaron mientras pasaba más tiempo en estudio bíblico y discipulado. Comencé la carrera. Comencñe a desear ser como Jesús. Y como Pablo, contaba todos esos logros anteriores y las metas previas de mi vida como basura en comparación al amor, gozo y paz que finalmente llegué a conocer en Cristo. Vi que mi carácter era pecaminoso. Un número infinito de premios y logros que nunca podían compensar. La carga fue quitada de mis hombros y encontré que no tenía que ser perfecta para agradar a Dios. Jesús ya lo era por mí. Ahora, yo quería ser como Jesús – Yo estaba en la Carrera y estaba corriendo. Por muchos años, había estado luchando por mantener la fe en todo lo que Dios me había pedido. Quiero ser una mujer de Dios, no una mujer del mundo. Yo no quiero ser descrita solamente por lo que he hecho en mi Carrera, a los ojos del mundo.
Nuestras circunstancias han cambiado continuamente. Hemos tenido nuestros propios negocios, trabajado para el gobierno, trabajado en el ministerio cristiano, hemos vivido con apoyo misionero, o sin ningún tipo de sueldo. Hemos vivido en lugares que amamos y en lugares que odiamos. Nuestros padres han pasado a través de la enfermedad y la muerte. Algunas veces, estuvimos contentas; en otras ocasiones, una de nosotras ha estado muy descontenta con la vida. Sin embargo, la resolución de mi vida es mantener la fe – conocerlo a Jesús – ser como Cristo.
Ser fiel. Hemos aprendido de Filipenses que la responsabilidad de obrar en nuestras vidas resta sobre nuestros hombros solamente, ¿cierto? ¡No! Hemos aprendido que es Dios quien obra en nosotras. Él comenzó, Él está trabajando ahora, y Él completará la obra. Él hace la obra de hacernos como Cristo porque le da placer. Dios sabe por lo que estamos pasando, Él puede ayudarnos a pasar por ello y ponernos de vuelta en la carrera si solo le pedimos. Sólo necesitamos responder a Él. Debemos hacer nuestra meta el conocerle, así como Pablo lo hizo. Reconocer a Cristo en cada una de las áreas de nuestras vidas. Esto me lleva a uno de mis temas favoritos – la verdad. Cuando yo me convertí en una creyente, me di cuenta que todo el conocimiento por el cual estaba luchando a través de la educación académica no era de importancia y podía ser detrimental para mi crecimiento cristiano si éste no viene de Dios. Escuché al Dr. Henry Brandt decir que tenemos una tendencia de colocar la sabiduría del hombre por encima de la sabiduría de Dios diariamente, aun cuando no sabemos lo que estamos hacienda. Él estaba hablando sobre psicología – una materia académica muy pagana y humanística. Mucha gente ha sido afectada negativamente por la psicología que no está enraizada en la Palabra de Dios y Su verdad.
La verdad es algo muy importante para mí. Después de convertirme en una creyente, deseaba conocer la verdad de Dios en cada materia – ciencia, historia, y literatura. Determiné tempranamente que nuestros hijos no debían perder sus mentes aprendiendo escombros desde el punto de vista secular, dejando totalmente fuera a Dios, sino que deberían aprender toda la verdad desde el punto de vista de la forma íntima en la que Dios lidia con la humanidad. Estudiar desde el paradigma cristiano, no desde el paradigma secular. No glorificando al hombre, sino reconociendo las obras de Dios con el hombre a través de la historia y la respuesta del hombre a Dios. Esto es lo que es historia realmente. La forma en la que Dios lidia con el hombre, y la respuesta del hombre a Dios, y las consecuencias de esas respuestas. La Escritura se refiere continuamente a la historia como una herramienta de enseñanza – ver lo que Dios hizo, ver cómo os judíos respondieron y las consecuencias, ver qué hace Dios por los judíos nuevamente y ver cómo ellos responden.
Considere la Palabra de Dios fiel, pruébela. Usted no se desilusionará.
El premio es dado a cada uno que cruza la meta. Esto no es sobre salvación. Es el deseo de conocer a Cristo, de ser fiel. No sabemos qué son los premios, pero sabemos que serán buenos porque ellos serán dados por un Dios bueno. ¿Será mi premio “Bien buen siervo fiel” de parte de mi Rey celestial? ¡Grandioso! Eso sería suficiente.
Las recompensas se mencionan usualmente en las escrituras en el contexto de persecución o de un tiempo largo de servicio que pasa desapercibido. Pablo mencionó una corona de justicia en 2 Timoteo. No solo para él, sino para todos los que han esperado su advenimiento – los fieles. En 1 Corintios 9, Pablo nos dice que nuestra recompense será una corona que durará para siempre. Vemos también lo mismo en 1 de Pedro 1. Imperecedera, pura, que no se marchitará, reservada en el cielo para usted.
Nosotras no somos responsables por el galardón – eso es de Dios – Él determina qué le es dado a cada creyente. Nosotras somos responsables por correr la carrera, manteniéndonos verdaderas a la Carrera y siendo fieles todo el camino, hasta el momento que crucemos la meta. No estamos en competencia con nadie. Es nuestra carrera personal.
El estar en el cielo sería suficiente recompensa. Por el tiempo que le queda, Pablo exhorta a los filipenses y a nosotras a vivir dignas de lo que ya tenemos – una posición justa en Cristo. Él nos exhorta a olvidar el pasado y continuar al futuro como corredor que sigue Adelante para alcanzar la meta. ¿Cuál meta? ¿Conocer a Cristo y ser como Él ahora? Al seguir el llamado divino, que es nuestra carril personal para correr. Y el galardón será cuando crucemos la meta – muerte física – a la cual seguirá la experiencia de eternidad espiritual, gozo y contentamiento…Ahora queremos glorificar a Dios – hacer aquello para lo cual Él me ha creado para hacer en esta tierra. Entonces nos gozaremos en Él por siempre - ¡eso es hacer aquello para lo cual fuimos creadas en ese momento!
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Piense en el Significado: Permanecer firme significa estar resistiendo las influencia negativas de la tentación, enseñanzas falsa o persecución. Permanecer firme requiere perseverancia cuando somos retados o sufrimos oposición – con la ayuda del Espíritu Santo y con la ayuda de creyentes, podemos permanecer firmes en el Señor. (Comentario Bíblico de Aplicación a la Vida, Life Application Bible Commentary, p. 108)
El estilo usual de Pablo cuando se dirigía a un problema o a una situación “difícil” era primero enseñar a través de la verdad que aplicaba, luego hablaba sobre la preocupación específica que tenía sobre la iglesia. Lea nuevamente Filipenses 4:2-3. Las mujeres fueron importantes en la fundación de la iglesia filipense, así como otras Iglesias. Pablo estimaba grandemente a sus colaboradoras en el Señor tal como lo vemos en Romanos 16:1-3, 6, 12-15. Revise Hechos 16:11-15, 40 para ver cómo comenzó la iglesia filipense. La carta de Pablo fue escrita unos 10 – 11 años después.
Referencia Bíblica: El Libro de la Vida, que se menciona primeramente en el Antiguo Testamento (Éxodo 32:32-33; Salmo 69:28; 139:16), refiriéndose al registro de todos los ciudadanos del reino de Dios. El “libro” simboliza el conocimiento de Dios sobre los que le pertenecen a Él. Ciudades antiguas tenían libros o rollos que contenían los nombres de todos los que tenían derecho a ciudadanía. Bajo el Nuevo Pacto, los cristianos están en el registro de Dios, y Él admitirá en la lista del cielo (Filipenses 3:20). A TODOS los creyentes se les garantiza estar en la lista del Libro de la Vida y serán introducidos a las huestes celestiales como pertenecientes a Cristo (Lucas 10:17-20; Hebreos 12:22-23; Apocalipsis 3:5; 20:11-15.) Ningún creyente será olvidado, ya que los nombres están escritos por eternidad. (Adaptado de la Biblia de Estudio NIV -NIV Study Bible, p. 1948; Comentario Bíblico de Aplicación a la Vida- Life Application Bible Commentary, p. 112)
¡Piénselo!: ¡Oh, amada, ore! Ore para que usted no sea la causa de discusiones en su iglesia, para que usted no llegue a ser parte de los que usted no sea parte de los que afectan el trabajo de la iglesia por la causa de Cristo. Y ore para seguir en los sabios pasos de Pablo si usted ha de ser parte de los que ayuden a resolver disputas entre otros. (Elizabeth George, Experiencing God’s Peace (Experimentando la Paz de Dios), p. 111)
Piense en el Significado: Gozo, una cualidad inherente en relación a las circunstancias, puede que no sea visto siempre; pero la forma en la que uno reacciona hacia los otros, bien sea en gentileza o en dureza, será notada. En Filipenses 4:5, Pablo exhorta a los filipenses, y a nosotros, que nuestra gentileza sea conocida o evidente para todos. Gentileza es la expresión externa de gozo. La palabra griega para gentileza es una palabra difícil de traducir en su totalidad. Se refiere al espíritu que es razonable, justo, y caritativo; dispuesto a dejar de lado los derechos propios para mostrar consideración a otros, pero sin sacrificar la verdad; no es vengativo. Un sinónimo es gracia. Jesús nunca sacrificó la verdad para ser amable, pero siempre tuvo un espíritu afable que a menudo desarmaba a los que le oponían. (Comentario de Conocimiento Bíblico del NT-The Bible Knowledge Commentary NT, p.663)
Lea: “Servir unos a Otros en el Conflicto” para más aplicación de esta lección.
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Imagínese esto. La ciudad está rodeada de soldados enemigos. El rey joven y sus oficiales dentro de los muros de la ciudad, rehúsan tercamente el salir la ciudad, diciendo: “No dejaremos nuestra ciudad especial.” Una voz, sin embargo, les siguió dando las noticias verdaderas. “No ganarán. Dios ha dado esta gran ciudad a Nabucodonosor. El pueblo morirá de enfermedad y hambruna. La ciudad será quemada. Sus familias serán destruidas a menos que se rindan.” El rey es Sedequías, y la voz solitaria de Dios, es el profeta Jeremías. El resto de la historia está en Jeremías 38:14-28. La respuesta de Sedequías no fue aceptar la misericordia y gracia de Dios, a través de obediencia y hacer las cosas a la manera de Dios. En cambio, Sedequías eligió protegerse a sí mismo y escuchar a sus compañeros, ignorar el conflicto y esperar que las cosas cambien. Pero no fue así. Toda la familia de Sedequías fue asesinada; él fue cegado y encadenado.
Conflicto. La palabra tiene un tono desagradable. Pero, ya que somos seres humanos y el pecado aún habita en nosotros, ya que vivimos en un mundo caído, el conflicto es parte de nuestras vidas a diario. El problema no es si tenemos conflictos o no. Para los creyentes, lo que hacemos cuando enfrentamos un conflicto es el asunto.
Teniendo enemigos citiando los muros de su ciudad es una presión externa. En las escrituras, Pablo se refirió a estas presiones externas que nos afectan individualmente y a nuestra iglesia – persecuciones, enemigos, maestros falsos, y las autoridades Romanas. Él contempló estas presiones. Permanece firme en un espíritu. No tengáis miedo. Pero, aquellas presiones externas a menudo causan fricciones internas. Usted sabe que esa presión de su esposo por su trabajo afectará su relación de pareja. Pronto, ustedes tendrán su propio conflicto interpersonal. Esto es lo que parece estar sucediendo en Filipos.
En nuestro estudio previo de Filipenses 2:1-11, vimos a Jesús, totalmente Dios y hombre, como el más grande siervo y nuestro ejemplo de servicio. Estamos para servir a Jesús a través del servicio que hacemos unos a otros, tal como Él lo hizo. Yo compartí cuatro aspectos con ustedes sobre un siervo gozoso:
Servimos a Jesús juntos, y nos servimos unos a otros individualmente. Parte de servir a Jesús a través del servicio hacia otros es resolver conflictos interpersonales en el Cuerpo. El conflicto hiere Su cuerpo y minimiza la efectividad de la iglesia para avanzar el evangelio. Es difícil predicar a Cristo y hacer discípulos cuando gastamos energía en conflictos internos. ¿Cierto? Conflicto interpersonal puede tomar lugar de muchas formas desde simple choques de comportamiento (el hecho que dos damas no se lleven bien) hasta desafío abierto entre personas. Sin importar la forma, un conflicto presenta una oportunidad para crecimiento. De hecho, algunas personas no prestan atención a sus necesidades de crecimiento en un área de sus vidas cuando ocurre un conflicto.
En el pasaje del día de hoy, Filipenses 4:3-4, no sabemos nada sobre estas mujeres. Quizá eran dos de las mujeres en el río cuando recibieron por primera vez el evangelio a través de Pablo. Quizá era diaconisas en la iglesia. Pablo las llama compañeras del evangelio. Ellas no eran insignificantes o causadoras de problemas. Ellas eran trabajadoras en dar al conocer el evangelio en Filipos. Probablemente, eran mujeres maduras, conocidas por los recipientes de esta epístola. Para los propósitos de nuestros días, las llamaremos Elizabeth y Cindy.
No conocemos cuál era el conflicto. Un comentario apuntaba: “Ha podido ser una fricción incidental entre dos mujeres cristianas energéticas.” Quizá, ellas se turnaban el tener la iglesia en sus casas. Elizabeth pudo haber criticado lo que hizo Cindy cuando fue la anfitriona. No había suficiente comida. Las sillas estaban muy cerca unas de otras. Quizá Cindy se atrevió a disciplinar al niño de Elizabeth. Esto es suficiente. Lo que haya pasado afectó a la unidad de la congregación. Y esto se trajo a la atención de Pablo. Esto había herido al cuerpo filipense. Aparentemente, medios inefectivos habían sido usados para parar el sangramiento. Pablo habla directamente a esta situación en su carta, y de su consejo sabio, podemos extraer tres principios concernientes a la resolución de conflicto.
La iglesia es un organismo vivo, no una organización. Un organismo compuesto de partes individuales. Así como nuestros cuerpos humanos responden inmediatamente para reparar una herida, bien sea ésta menor o mayor, así debe hacerlo el cuerpo de Cristo. Supongamos que usted se corta un dedo. ¿Qué ocurre? El cuerpo hace todo lo posible para comenzar el proceso de sanación. Las células más cercanas empiezan a trabajar en la coagulación, cierran la herida con una costra y luchan contra gérmenes invasores. Es la responsabilidad de las células más cercanas a la herida, el llegar allí primero y parar el sangramiento. Entonces, otras vienen a ayudar a reparar el daño y a hacer el cuerpo más fuerte. Así también debe hacerlo el cuerpo de Cristo. Las células dentro de nuestro cuerpo físico saben lo que deben hacer. los miembros del cuerpo de Cristo no siempre saben qué hacer. pero, la Palabra nos da dirección y guía para que seamos obediente.
No busco oportunidades para resolver conflictos. La mayoría del tiempo, mi respuesta es ignorar las semillas del conflicto, esperando que, al ignorarlas, la tensión se calme o simplemente desaparezca. Yo quiero que todos sean parte del equipo y se lleven bien como tal. Otra de mis excusas: no pienso rápido cuando estoy de pie. Así que, ¿cómo puede el Señor usarme para manejar alguna crisis entre dos personas, cuando yo no puedo pensar correctamente? Actualmente, Él no quiere que yo maneje ninguna situación. Él quiere que yo le permita a Él hacer Su obra a través de mí. Yo tengo que ser débil, para que Él sea fuerte a través de mí. Él quiere mi obediencia. Las células en el codo deben estar listas para reparar una herida, así como las células en mis dedos o en el corazón. Listas para funcionar de la forma que fueron diseñadas, dependiendo del flujo de vida sanguíneo para traer los ingredientes necesarios para sanar la herida. El propósito de la acción esa promover sanidad.
Este es un principio de uno-a-uno. En tanto que usted reconoce que está en un conflicto con una hermana, entonces usted es responsable de hacer algo. Esté de acuerdo de trabajar en ello. Esto es obediencia. Abandone su derecho a estar en lo correcto. Esto es humildad. La razón es por el bien de la relación y de la iglesia. Este es otro aspecto de servirnos unos a otros tal como lo hizo Jesús.
Hablando de Jesús, ¿Qué enseñó sobre este punto?
Pablo nos da más información sobre cómo lograr reconciliación.
¿Notó usted el énfasis de Jesús en confidencialidad y confianza? Primero, vaya sola. Vaya directamente a la persona con la cual usted tiene el conflicto. Luego, unos pocos individuos selectos; luego las autoridades sobre esa persona. Nótese, Jesús no dijo que se debía hablar sobre este asunto a cualquiera que escuche. Algunas veces usted puede buscar consejo de una amiga de confianza en cuanto cómo proceder. Sin embargo, es fácil cruzar la línea de quejas y chismes. Yo llamo a esto compartir información sensible en lugares inapropiados. Es sensible porque cualquier cosa negativa que se diga sobre una persona o ministerio planta semillas de duda en la mente de la otra dama sobre esa persona o ministerio en su totalidad. Esto no es beneficioso para el Cuerpo. Alguien siempre sale herido. Es un lugar inapropiado cuando esa persona a la que usted le comenta la situación no tiene autoridad para hacer algo sobre la situación.
En caso de un ministerio, acérquese a la persona que está involucrada el proceso de toma de decisiones de ese ministerio. Hay posibilidades que esa persona está en pleno conocimiento del reto. Su solución puede que ya se haya probado. O, el tiempo puede que no sea el correcto. En cualquier caso, la parte más difícil es dejarla allí, ¿no es cierto? Confianza. Esto es lo que está involucrado cuando se es humilde. Servir a Jesús a través del servicio de los unos a los otros en amor, no hiriéndonos unos a otros o al Cuerpo como un todo.
Pablo urge a otros alrededor de las dos mujeres a venir en su ayuda. Esta es nuestra responsabilidad. ¿Por qué? Un cuerpo trabaja para repararse a sí mismo para que pueda funcionar efectivamente. ¿Qué hace usted cuando dos de sus amigas se tratan mal la una a la otra? Para nuestros propósitos, vamos a hablar de dos etapas del conflicto: 1) Cuando se está desarrollando y, 2) Situacional.
Desarrollo significa que, en un período de tiempo, la relación entre las dos mujeres ha creado gradualmente más fricción. Sus amigos pueden reconocer claves sobre lo que está pasando, y alguien a quien le importa hablar la verdad en amor para ambas partes, esperando que reviente una explosión, quizá hace una llamada telefónica o una conversación a la hora del almuerzo. Idealmente, esta es la etapa más fructífera para ayudar a estas dos mujeres a reconciliarse. Es como un papel que corta, pero sana rápidamente.
El ignorar estas oportunidades usualmente trae una situación de crisis emocional. Esto es llamado conflicto situational. Lo que se acumula ahora sale por motivo de una mala palabra, una mirada, o un cambio repentino de planes. Una crisis existe. Algo tiene que hacerse para ayudarles inmediatamente. Mujeres en crisis tienen rápidamente una pérdida de perspectiva; ellas se sienten que todo se ha vuelto patas arriba. Es por esto que presenta una gran oportunidad para crecimiento personal. Pero, ellas necesitan una tercera parte imparcial, que las ame a ambas, para interceder y ayudarles a hablar sobre el conflicto. Esta es lo que se llama una Intervención en Crisis.
Muy bien, ¿cuándo interviene usted?
En otras palabras, logre tener su atención. Idealmente, esto debe hacerse de forma separada con cada una de las partes. Primero, hable con la más agitada y luego con la más calmada. No deje que ventilen sus cosas la una a la otra o a usted. Usted es un partido imparcial. ¿Cómo puede usted lograr un contacto de confianza? A través del ambiente, que sea privado y sin distracciones, donde la confidencialidad pueda ser preservada. Esté relajada y sea genuinamente amable y preocupada. Escuche cuidadosamente pero objetivamente al preguntar preguntas como: “¿Qué ha pasado?” recolecte los hechos. Deje que sea pausado. Este no es su tiempo de hablar. Debe escuchar atentamente.
Para hacer esto, deben usarse habilidades reflexivas al escuchar. Concéntrese en la respuesta y el punto focal. Dar respuesta es seguir lo que la otra persona dice, pero con sus propias palabras, en forma de preguntas para clarificar como, por ejemplo: “Usted me está diciendo…?”, “¿Escuché decir que usted….?”, “Entiendo que usted dice….”. Esto garantiza a la persona que usted entiende su situación. Centrase en el punto focal es ayudar a las damas a hacer conclusiones sobre los problemas reales presentes que ellas confrontan. Tome los hechos que conciernen a la crisis solamente. No cada uno de los problemas que las damas han experimentado el año pasado. Separe los hechos. Qué es lo que ha causado el conflicto- EN ESTA OCASIÓN. Uno o dos cosas actualmente habrán causado el conflicto inmediato.
Ayude al proveer una posible salida al conflicto. Establezca metas que son posibles, medibles, y a corto plazo. Sugiera con tacto algunas opciones no amenazadoras:
Usted puede guiarlas a orar por las necesidades de ambas. Quizá, puede arreglar reuniones cortas y periódicas para compartir. Si ellas son compañeras de trabajo, desarrolle descripciones claras del trabajo, para que cada una de ella conozca qué debe hacer y qué no debe hacer. Hable sobre cómo advertir la posibilidad de conflicto de una forma no explosiva.
Somo uno en el Señor, quien tiene un Cuerpo. Cualquier ruptura o quebrantamiento causa dolor al Cuerpo y afecta negativamente el avance del evangelio. Somos de Cristo, no del mundo. Nos comportamos de forma diferente ya que pensamos diferentemente unos de otros. Debemos ser obedientes. No como Sedequías quien pudo haber salvado a su familia y a su ciudad si hubiese obedecido. Los caminos de Dios no son como los nuestros. Son mucho mejor.
¡Oh, amada, ore! Ore para que usted no sea la causa de discusiones en su iglesia, para que usted no llegue a ser parte de los que usted no sea parte de los que afectan el trabajo de la iglesia por la causa de Cristo. Y ore para seguir en los sabios pasos de Pablo si usted ha de ser parte de los que ayuden a resolver disputas entre otros. (Elizabeth George, Experiencing God’s Peace (Experimentando la Paz de Dios), p. 111)
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
¿Qué es la preocupación? La palabra griega que se traduce como “afanoso” en el versículo 6 significa: “el ser empujado en direcciones diferentes.” La preocupación es el ladrón más grande del gozo. Sin embargo, no es suficiente para nosotras, el decirnos a nosotras mismas “para de preocuparte,” porque esto no atrapará al ladrón. La preocupación viene de “adentro,” y se necesitan más que buenas intenciones para obtener la victoria. El antídoto para la preocupación es una mente segura. (Warren Wiersbe, (Sé Gozoso) Be Joyful, pp. 125-126)
Piense en el Significado: la palabra para oración es, generalmente, un término que significa una conversación de adoración con Dios, mientras que petición (suplicación) se refiere a una oración con un sentido de necesidad. El agradecimiento se centra en la actitud del corazón de uno cuando nos aproximamos a Dios. Peticiones se refiere a pedir directamente la ayuda de Dios en necesidades específicas. (Comentario Bíblico de Aplicación a la Vida, Filipenses, Colosenses & Filemón) Life Application Bible Commentary, Philippians, Colossians & Philemon, p. 115)
a. La paz de Dios
b. Transciende (sobrepasa) todo entendimiento (comprensión)
c. Guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús (hay sólo otra instancia de la palabra “guarda” usada de forma similar en el Nuevo Testamento. En 1 Pedro 1:5 se usa para expresar que estamos seguras en la salvación a través de Cristo)
Piensa en el Significado: La palabra griega para “guardar” es un término militar que significa rodear y proteger una comunidad o ciudad. Los filipenses vivían en una comunidad, y estaban familiarizados con los guardias romanos que vigilaban, guardando la ciudad de cualquier ataque externo. (Comentario Bíblico de Aplicación a la Vida, Filipenses, Colosenses & Filemón) (Life Application Bible Commentary, Philippians, Colossians & Philemon, p. 116)
¡Piénselo!: Cada vez que oramos, nuestro horizonte cambia, nuestra actitud hacia las cosas cambia; no algunas veces, sino todas las veces, y lo más asombroso es que no oramos lo suficiente. (Oswald Chambers (1874-1917))
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
Lea Filipenses 4:10-23.
Referencia Bíblica: Pablo hace un comentario interesante en el versículo 12 sobre vivir en prosperidad. ¿Cómo puede decir él esto? Pablo conocía de primera mano la riqueza y privilegios que vienen al ser un Fariseo prominente en la comunidad judía y también al ser un ciudadano romano (Hechos 22:3-5,25-29; 26:4-5).
Piense en el Significado: La palabra contentarme en griego significa “auto-suficiente” e independiente de otros. Pablo usó este término para indicar su independencia de todo menos Cristo, ya que Cristo era la única fuente de la vida de Pablo (Filipenses 1:21, 4:13). Esto contrastaba con la filosofía estoica (de ese tiempo) que usaba la palabra “contentamiento” para describir a una persona quien pasivamente aceptaba todo lo que viniese. El modelo estoico promovía auto-suficiencia al punto que todos los recursos para manejarse en la vida venían de uno mismo. Pablo explicó que su suficiencia estaba en Cristo solamente, quien proveía la fortaleza para enfrentar todas las circunstancias. (Comentario Bíblico de Aplicación a la Vida, Filipenses - Life Application Commentary, Philippians, p. 121)
¡Piénselo!: Toda la naturaleza depende de recursos escondidos. Los grandes árboles envían sus raíces dentro de la tierra para poder sacar agua y minerales. Ríos tienen sus fuentes en montañas cubiertas de nieve. La parte más importante del árbol es aquella parte que usted no puede ver, el sistema de raíces; y la parte más importante de la vida cristiana es aquella que sólo Dios ve. A menos que tomemos de las fuentes más profundas de Dios por fe, fallamos contra las presiones de la vida. Pablo dependía del poder de Cristo obrando en su vida. “¡Puedo con Cristo!” era el lema de Pablo, y éste puede ser nuestro lema también. (Warren Wiersbe, ¡Sed Gozoso! - Be Joyful, p. 137)
Pablo no siempre aceptó ayuda. En 1 Corintios 9:11-19, Pablo escribió que él no había aceptado dinero de la iglesia filipenses para evitar ser acusado de predicar para obtener dinero (predicar por las razones equivocadas). De hecho, mientras que estaba en Corintio, los creyentes filipenses le ayudaron (2 Corintios 11:9). Él aceptó su oferta porque ellos la dieron voluntariamente para ayudar a Pablo.
Referencia Bíblica: El sacerdote en el Antiguo Testamento iba al lugar santo para colocar incienso en el altar y éste ascendía con aroma agradable. Un cristiano en su dádiva es como un sacerdote que hace una ofrenda a Dios—véase Levítico 7:12-15. (J. Vernon McGee, Comentario A Través de la Biblia, Filipenses -Through the Bible Commentary, Philippians, p. 105)
“…Y esto pido en oración, que vuestro amor abunde aun más y más en ciencia y en todo conocimiento, para que aprobéis lo mejor, a fin de que séais sinceros e irreprensibles para el día de Cristo, llenos de fruto de justicia que son por medio de Jesucristo, para gloria y alabanza de Dios…Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!” (Filipenses 1:9-11, 4:4)
© 2017 Melanie Newton.
Traducido al español por: Kerry-Ann Chambers
© 2017 Melanie Newton.